Los hechos sucedidos en el pasado forman parte de la Historia. La cronología permite fijar los hechos históricos en el tiempo.

​

Unidades de medida del tiempo

​

Para medir tiempos históricos largos se pueden utilizar diversas unidades temporales; las más usuales son las siguientes:

​

• Año: 365 días.

​

• Lustro: 5 años.

​

• Década: 2 lustros.

​

• Siglo: 10 décadas.

​

• Milenio: 10 siglos.

​

Para diferenciar las décadas dentro de un mismo siglo se nombran de forma diferente, utilizando para ello la cifra de las decenas. Por ejemplo, si se habla del siglo XX, se llama década de los veinte al período comprendido entre 1920 y 1929; la década de los treinta corresponde a 1930-1939; y así sucesivamente.

​

En cuanto a los siglos y los milenios, comienzan a contarse siempre desde el año 1, es decir, comienzan en el año 1, 101, 201, y así sucesivamente (1001, 2001, etc., en el caso de los milenios).

​

La cronología en las distintas culturas: la Era Cristiana

​

No todas las sociedades parcelan y miden el tiempo de la misma forma. Cada cultura empieza a contar los años a partir de un momento importante para ella. Así, los romanos empezaron a contar el tiempo a partir de la fundación de Roma. En nuestra cultura el primer año de la era es el del nacimiento de Jesucristo; todo el tiempo anterior al nacimiento de Jesucristo se denomina anterior a nuestra era (a.C.) y el posterior, después de nuestra era. Los musulmanes, en cambio, empezaron a contar los años a partir del momento en que Mahoma, el profeta del islam, escapó de la ciudad de La Meca para difundir el islamismo, que se corresponde con el año 622 de nuestra era.